Entidades financieras buscarían quedarse con cartera de La Polar Colombia


Como el “mejor” activo que tiene La Polar en Colombia califican fuentes de la compañía a la cartera de colocaciones del retailer en el país cafetero. Por lo mismo, la firma habría recibido el interés de varias entidades financieras que buscarían quedarse con el negocio.

En todo caso, al interior de La Polar comentan que aunque hay interesados en comprar sólo el negocio financiero, insistirán en la estrategia de incluirlo dentro de las negociaciones de aquéllos que buscan hacerse de los otros activos de la filial colombiana. Por lo mismo, por ahora no se ha entregado respuesta a los eventuales interesados.


Negocio financiero


Según entendidos, la cartera de La Polar Colombia estaría valorada en unos US$ 15 millones.

De acuerdo con el diario colombiano La República, en base a datos de la Superintendencia Financiera de ese país, La Polar es el segundo operador chileno de tarjetas de crédito, a diciembre de 2013. La firma tiene vigentes más de 116 mil tarjetas, lejos del poco más de millón que tiene CMR Falabella, pero más que duplicando a Ripley, que tiene 53.226.

La compañía informó hace unos meses que los ingresos financieros de la Tarjeta La Polar, durante el tercer trimestre de 2013 -la última cifra entregada-, alcanzaron los 
$ 1.149 millones, lo que representa un aumento del 51% respecto del mismo período del año anterior.

A esa misma fecha, las colocaciones de la tarjeta sumaban $ 8.800 millones, un alza de 36% respecto de igual periodo de 2012.

En tanto, un 75% de la cartera estaba al día en sus pagos, mientras que un 14% tenía una mora de entre uno y 30 días.


Estrategia de salida


El viernes de la semana pasada, La Polar anunció que abandonaba su negocio en Colombia. Según cercanos a la compañía, el directorio -que aprobó la medida el jueves- se habría autoimpuesto un plazo de dos meses para concretar la salida de ese país.

El retailer ya había dicho hace unos meses que buscaba soluciones para revertir los malos resultados de la operación, lo que incluía la posibilidad de que entrara un socio, lo que finalmente, no fue posible.

Así, hacia fines de la semana pasada, La Polar confirmó que se encuentra evaluando las alternativas para materializar su salida de ese país. Una de éstas es la venta de activos y, si bien reconoce que hay procesos en curso, destaca que “no se han alcanzado acuerdos específicos”, dijo al regulador bursátil.

Sin embargo, fuentes de la compañía comentaron a Diario Financiero que hoy la cadena conversa con tres interesados en quedarse con dicha operación.

Incluso, uno de los interesados está haciendo su análisis de la filial y podría concretar una oferta en un corto plazo, aseguran cercanos.

Los otros dos, en tanto, ya habrían entregado sus ofertas, aunque por parte de la operación, por lo que La Polar estaría a la espera del primero antes de decidir.

Medios de comunicación colombianos mencionan entre los interesados a Cencosud -que habría apostado por algunos locales del retailer y no por la operación completa-, aunque la chilena ligada a Horst Paulmann negó tal información.

En caso de que la venta falle, tendrían que activar el plan B: bajar la cortina. En este caso, el plazo para terminar con La Polar Colombia sería de unos 90 días.

Respecto de los efectos, entendidos comentan que habría un impacto en los resultados, por temas tributarios, pues no se recuperaría el impuesto, de alrededor de unos US$ 20 millones. En todo caso, la caja no se tocaría. Además, dicen, el cierre de la filial no generaría mayores efectos, puesto que los activos que tienen alcanzarían para pagar los pasivos.

El mercado continúa premiando la salida de La Polar de Colombia, anunciada el viernes pasado.
Ayer, el papel del retailer subió 12,23% a $ 47 por acción. Y en los últimos tres días anotó un avance de más de 34%.
En términos de montos transados, ayer se negociaron más del doble de títulos del retailer en comparación al lunes, con más de $ 1.800 millones.
De esta manera, el papel de la compañía recuperó gran parte de las pérdidas anuales que anotaba antes que anunciara su salida del mercado colombiano. Así, el título resta 31,94% en el año, mientras que el año pasado cedió 66,44%.
En el mercado comentan que si bien se espera que el proceso para salir del país cafetero sea extenso, los beneficios de bajar la cortina a su filial en dicho país serán mayores a largo plazo para la compañía.